Claroclarito
Concluida una nueva versión de nuestra tradicional y patrimonial fiesta, es sano y amanera de brújula, que se muestre el norte para nuevas entregas. Con humidad y deseo de servicio voy a hacer un balance sobre los aciertos y desaciertos; acerca de lo que gustó y lo que no, y alrededor de lo que comenta la sabiduría popular, que generalmente es certera e implacable. Cuando aún muchos tienen huellas de la cruz de ceniza en su frente, podría hacerlo de manera puntual y enumerada, pero lo que tengo son unas opiniones sueltas, muy personales y nada esquematizadas. Creo que son aspectos a tener en cuenta, antes de pensar en el nombre de la soberana que va a reemplazar a la sobrina-nieta de Meira Del Mar, porque este es en un jolgorio que ya no es el de una villa, ni siquiera de una ciudad, sino de un referente internacional globalizado y que por lo tanto tiene que reinventarse y tomar nuevos aires.
Lo Bueno: Indudablemente la reina, Isabela Chams, Vega quien demostró que por tela no fue, ni por baile tampoco. Esforzada, dedicada, alegre, incansable y comprometida con el honor de ser Su Majestad. Hizo un magnífico espectáculo de coronación y proyectó a nivel internacional el pre y el carnaval. Hay que agregar la buena interacción del Alcalde Jaime Pumarejo y de Silvana Puello, la Primera Dama, con la gente. Sencillez eidentificación con los ex habitantes de la calle, los niños y la esencia de Barranquilla, fueron la clave de su rol como figuras públicas. Igual lo consiguió, la Gobernadora Elsa Noguera, quien se la jugó rescatando y dignificando todo lo que aporta el carnaval anfibio, el autóctono, el de los pueblos a la fiesta urbana. Logró posicionar lo que son: burros, guacamayas y micos, por encima de la corona de una reina departamental. Punto positivo, para el llamado de la Corporación Regional Autónoma del Atlántico, CRA, a fin de conseguir hacer un jolgorio, amigable con el ecosistema: sin agredir a los animales, preservando la vegetación y los recursos naturales, y sin generar contaminación sonora. Bien también, por los ciudadanos que hacen gala de orgullo, por haber nacido o porque viven en esta ciudad y por los empresarios que lograron traer a figuras de talla internacional a conciertos previos de los 4 días rumberos. Magnifica también la campaña que lideró la Secretariade Desarrollo Departamental, desde la Subsecretaria de Turismo, en el aeropuerto y hoteles, para poner #OjosEnTodas Partes a fin de combatir el abuso sexual en niños, niñas y adolescentes. ¡Perfecto el homenaje y tributo que se rindió al maestro Juan Piña, porque esos hay que hacerlos en vida!
Lo Malo: No ofrecer mas espectáculosgratuitos, donde no haya que pagar sillas costosas por ver. Teniendo en cuenta quehay más de 100 nuevos habitantes llegados de Venezuela, había que hacer una oferta masiva. Sigue siendo mala y pobre la Batalla de Flores –que por lo poco que conectó emocionalmente, la insípida transmisión de TeleCaribe– no fue una tardede entusiasmo, frenesí y alegría. Hay que mejorar el desfile de apertura, por encimade la necesidad de patrocinios y apoyo de medios nacionales. Pésimo, además, no meterle calidad musical y artística a un Festival de Orquestas, que corre el riesgo de languidecer, por lo mismo: porque son otros tiempos y no vemos en interacción de tarima a grandes figuras –como ocurría antes– por conseguir un Congo de Oro;pasó sin pena ni gloria. De igual forma es requisito básico, priorizar, pero con sentido de social y humano, la agenda de la Reina. La figura central del Carnaval, no puede seguir estando al servicio del amiguismo, los grandes anunciantes o los estratos altos, Ella es del pueblo y para el pueblo y -sin darse cuenta seguramente- dejó a muchos “metidos”, “con los crespos hechos”. No es la reina, cómo sea que se llame, es lo que representa para niños y jóvenes, mas allá de los interesesmonetarios: Debe estar primero una especie de marketing o responsabilidad social. Regularzongas así mismo, lastransmisiones de nuestro canal TeleCaribe: densas, improvisadas, sin mayor esfuerzo en la producción y algo flojas en lo periodístico. Feo que propiciemos enfrentamientos que a nada llevan entre la reina, quien es la Ama y Dueña del Carnaval y talentosas influencers, que también tienen lo suyo y también su espacio y público. Suficiente confrontación hay en Colombia, para atizar el fuego con algo tan valioso como lo es un invaluable patrimonio cultural.
Feo: Los sectores ciudadanosirresponsables –con esta ciudad y consigo mismos- que generaron caos y riñas bajo el influjo del licor y la intolerancia, como ocurrió en la calle 72 y el martes en el barrio El Recreo. Horrible lo de las mujeresborrachas, irrespetuosas y faltonas con la policía, que bajo una mal entendida “liberación” y empoderamiento, nos dejaron la sensación de pena ajena. También las vergonzantes y agresivas, convencidas del cuento de que son vedettes y en plena Batalla de Flores, hacen gala de ser expertas en artes marciales, creyéndose con derecho a faltarle a todo el mundo. Fatal así mismo, una Guachernademorada y represadora, que deja sin público a la verdadera creatividad y a quienes se esfuerzan por hacer sus disfraces. totalmente frustrados y decepcionados. ¡De igual forma malo, que no se determine previamente quiénes, vale la pena que salgan en ese espectáculo, que más que para que borrachos pantalleros, hagan sus shows ridículos, está concebida como un evento nocturno, rescatado por nuestra siempre querida Estercita Forero!Eso hay que valorarlo, sin duda alguna…
2 comentarios
Muy claro lo que dices, totalmente de acuerdo, en la batalla de flores falto más estrellas de la vida nacional e internacional y muy mal hecho que la guacherna se demorara tanto
Excelente crónica. En total acuerdo.